Visitas

domingo, 3 de mayo de 2015

Resaca, eres tú?

El día después. Nos encanta recordar, pero sobre todo, nos apasiona revivir algo que ha ocurrido hace muy poco. Dicen que para que un recuerdo sea recordado has de generarlo lo antes posible.
En esta vida que nos ha tocado vivir, los recuerdos se construyen a una velocidad endiablada. Antes, una foto no podías compartirla hasta que estuviera revelada. Ahora, el simple botón "compartir", ese mismo que te pediré que aprietes cuando termines de leer esto, es un arma fatal que te acerca al momento pero te aleja de saborearlo.

Al final de cada " día después" te encuentras con un montón fotos y vídeos, que tu móvil, con tu conocimiento involuntario, guarda en ese carrete infinito, en ese álbum ficticio. 

Esa mañana al despertar, acudes a la arma de moda. Coges el móvil y lo pones a cargar. Al encenderlo, tus grupos de whatsapp arden. Se suceden las fotos y los vídeos, las últimas noticias de los integrantes del grupo y cada uno cuenta como ha pasado la noche o como se ha despertado.

Y en ese instante cuando comprendes que, a pesar de que la tecnología ha arrasado con todo lo que ha podido, se ha dejado algo importante en el camino.

Es en la famosa mañana del día después, cuando ya has repasado todo lo que te han pasado y has visto todo lo que captaste con tu móvil, cuando aparece.

Esa palabra de 6 letras, tan repetida por todos, conocida por muchos y sufrida por otros tantos. La conoces de sobra. Te la presentaron hace ya algún tiempo e incluso te habían hablado de ella. Se coló en nuestra vida hace unos años y desde entonces nos persigue. Se alía bastante con el alcohol, aunque el amor y la amistad la siguen de cerca. Aparece de repente, sin previo aviso y le encanta las mañanas.
Probablemente la conociste un sábado, cuando empezaste a salir los viernes. Luego empezó a coincidir contigo en las mañanas de los domingos y los univesitarios se acuestan con ella los jueves por la noche, come en su casa los viernes y se marcha con una nota que no varía , " Volveré". Y siempre suele dejar la nota en el mismo lugar que la caja de los ibuprofenos. Además le encanta las épocas de fiestas y el verano. Te habrá impedido comer alguna vez y te habrá obligado a quedarte en la cama mientras te repite por activa y por pasiva porque está aquí, porque ha vuelto.

En esta sociedad donde todo es más fácil y previsible, donde todo está más controlado de lo que pensamos y donde la improvisación se está dejando vencer por la rutina, la resaca adquiere un papel fundamental.

Una vez me dijeron que cuando perdemos a alguien, nuestro entorno tiende a ponerse en nuestra situación y nos sueltan comentarios del tipo " sé por lo que estás pasando". Y aunque lo harán porque nos aprecian, jamás nadie podrá sentir exactamente lo mismo.

Con la resaca creo que nos pasa algo parecido. Por el camino iremos perdiendo cosas que hasta ahora las considerábamos normal tenerlas. Todo será más breve, más resumido. Conforme vayamos avanzando encontraremos la rutina más presente en nuestra vida.
Y como he dicho anteriormente tendremos la opción de revivir momentos, de trasladarnos al pasado.

Ahí la resaca será la que realmente te recuerde de verdad aquella noche, aquel momento. Las fotos ayudarán, la compañía será importante pero sin duda, será tu cabeza la que recuerde lo que pasó aquel día.

Tengo claro que volverá y que se irá. Pero a partir de ahora,intentaré dosificarla mejor. No se trata de que acudir a un recuerdo con más rapidez, sino de experimentar y revivir el momento.

Resaca, eres tú?

Pd: No olvides compartir. Gracias por leernos.









No hay comentarios:

Publicar un comentario